La mesa de camilla

La mesa de camilla se convierte en invierno en elemento indispensable para el comedor o sala de estar de la casa. 

Es la caricia del invierno porque reúne a su alrededor a toda la familia, no solo para comer, también para conversar o ver la televisión.

El uso de la mesa de camilla constituye una costumbre que viene de lejos. Antes del terciopelo se usaba tela de paño grueso capaz de conservar y transmitir rápidamente el calor de un brasero, con el único inconveniente de su peso elevado. Después apareció el terciopelo más agradable al tacto y mucho más ligero. Más recientemente las telas conocidas por todos como "chenillas" con multitud de colores y estampados, que mejoran día a día su calidad y prestaciones.

Las chenillas utilizadas en las mesas de camilla, también se usan para confeccionar cojines y fundas multiusos... e incluso las más suaves se utilizan para fabricar cortinas, ya que con este material se consigue un mayor aislamiento lumínico, térmico y acústico de la casa. Como decoración, se usan tiras laterales con un visillo o panel japonés al fondo cubriendo la ventana.

Incluso en hogares con calefacción central o de gas, sus habitantes no renuncian a la mesa de camilla, porque aporta gran placidez sentirse cubierto y protegido durante la comida o contemplando una película durante los fines de semana. Un nuevo aliciente para disfrutar del invierno.

En Muebles Hermanos Molina ponemos a su disposición mesas de camilla completas con formas rectangular o circular y ropa para mesa con multitud de colores y estampados, para que pueda elegir la más conveniente en su hogar.

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